Urbanización del circuito de Can Dubler

El antiguo solar de la plaza Can Dubler en Sant Boi de Llobregat se convierte en un parque ciclista. La nueva propuesta aprovecha la topografía existente para desarrollar su trazado de casi un kilómetro de largo.

Imatge del projecte
Jeroen Van Mieghem
Ficha técnica
  • Fecha del proyecto:
    Febrero 2010
    Data inicio de la obra:
    --
    Data fin de la obra:
    --
    Fecha de ejecución:
    Julio 2011
    Municipio:
    Sant Boi de Llobregat
    Superficie:
    17.479 m2
    Coste:
    957.564,69 €
  • Autores:
    Claudi Aguiló Riu (arquitecto – AMB)
    Dirección de proyecto:
    Claudi Aguiló Riu (arquitecto – AMB)
    Dirección de obra:
    Claudi Aguiló Riu (arquitecto – AMB), Manel Sanz (técnico de obra – AMB)
    Colaboradores:
    Eva Pagès (arquitecta), Carlos Villasur, Gisela Traby (ing. técnicos industriales), Catalina Montserrat (ing. agrónoma), Ainhoa Martínez (estudiante de arquitectura)
    Contratista:
    EUROCATALANA Obres i Serveis SL
Descripción

El proyecto surgió de la voluntad del Ayuntamiento de Sant Boi de Llobregat de dar otro uso al solar de la plaza de Can Dubler, situada en el polígono industrial de Can Calderón. El solar se caracteriza por ser un espacio verde con una cota casi constante en todos sus puntos, salvo unas dunas formalizadas a partir del mismo terreno.

La intervención pretendió mantener el carácter de espacio público de la plaza. Propone la inclusión de una pista para ciclistas y patinadores dotada de los servicios necesarios. Se respeta al máximo la topografía actual para minimizar los movimientos de tierras y, para ello, el trazado de la pista se desarrolla a través de las dunas existentes: rodeándolas y adaptándose a ellas, se definen las curvas y los cambios de pendiente adecuados a este tipo de pista; el resultado es un recorrido de cerca de un kilómetro de largo con un ancho de siete metros.

Atendiendo a criterios de funcionalidad, el circuito se retira del límite de la calle de Múrcia para dejar un espacio libre que funcione como acceso al equipamiento. Atendiendo a criterios de seguridad y para que esta zona de acceso se entienda como un espacio de relación que puedan utilizar tanto los deportistas como el resto del público, el trazado de la pista queda segregado mediante una cerca de protección y el acceso limitado a los usuarios con bicicleta o patines. En esta zona de acceso, aprovechando una pequeña construcción existente, se ubican los servicios que constan de cabina de control, lavabos y enfermería.

La iluminación de la pista está formada por una distribución homogénea de columnas troncocónicas de 12 metros de altura con cuatro proyectores de 250 W cada una, orientados a distintas direcciones y alturas, y que ponen en relieve el carácter de espacio público del equipamiento. La colocación del verde responde tanto a criterios de definición del espacio como de seguridad. Se crean nuevas dunas de protección y separación de la pista en los tramos en curva, cubiertas con vegetación arbustiva blanda para proteger una posible salida de pista de los usuarios. En los tramos en que no hay dunas de protección se mantiene la vegetación existente. Como cierre del equipamiento se opta por una cerca verde a lo largo de todo el perímetro del solar, con tres especies de enredaderas de distinta floración que, además de proteger y delimitar, dignifican el espacio.

Los criterios medioambientales que definen la propuesta son, en primer lugar, conservar el carácter de espacio verde del emplazamiento y transformarlo en un verde sostenible, utilizando especies que requieran poco mantenimiento y un gasto moderado de agua. En segundo lugar, hacer que todo el sistema de recogida de agua y drenaje, con las graveras colocadas en los espacios libres resultantes del trazado de la pista, permita infiltrar el agua de lluvia en el mismo terreno hasta el nivel freático a través de los pozos de grava. También se ha previsto la instalación segregada de riego para poder utilizar en un futuro la red de aprovechamiento de agua de saneamiento de la depuradora de Sant Boi. Por último, el material utilizado como aditivo en el aglomerado de la cinta de la pista proviene del reciclaje de neumáticos que ya no se usan, así como el material drenante de las graveras, obtenido del derribo de hormigón.

Dónde