Ordenación de la calle Major

Ordenación de la calle Major para reforzar su carácter de vía cívica y mejorar la calidad del espacio urbano con mobiliario y nueva pavimentación.

María José Reyes
Ficha técnica
  • Fecha del proyecto:
    Julio 2009
    Data inicio de la obra:
    --
    Data fin de la obra:
    --
    Fecha de ejecución:
    Marzo 2010
    Municipio:
    Montcada i Reixac
    Superficie:
    9.055 m2
    Coste:
    3.733.313,38 €
  • Autores:
    Jordi Navarro (arquitecto – AMB)
    Dirección de proyecto:
    Jordi Navarro (arquitecto – AMB)
    Dirección de obra:
    Jordi Navarro (arquitecto – AMB), Javier Navarro (ing. técnico de obras públicas – AMB)
    Colaboradores:
    Antonio Vasco (ing. técnico de obras públicas), Catalina Montserrat (ing. agrónoma), Jordi Bardolet (ing. técnico agrícola), Joan Codina (ing. técnico industrial), Rafael Morant (técnico auxiliar de obra), Luis Felipe Ibarra, María De Ochoa, Isidro-Félix Verano (arquitectos), Carlos Javier Verdugo (estudiante de arquitectura)
    Contratista:
    Rogasa
Descripción

La calle Major de Montcada es el eje neurálgico del casco viejo de la población, donde se generan las actividades propias de un centro urbano. Es de unos 500 metros de largo y es perpendicular al río Ripoll, sobre el que, a través de un puente de peatones, se conecta con el barrio de Can Coll, en la otra orilla.

En la calle hay edificios de equipamientos como el Ayuntamiento, el Teatro auditorio municipal, la comisaría de Policía, la iglesia de Santa Engràcia y la escuela del Sagrat Cor. También hay algunos edificios residenciales de estilo modernista de interés. La calle suele estar llena de vida, alcanzando un carácter más lúdico por las tardes, cuando no puede haber coches aparcados y se restringe el paso de vehículos. La intervención pretende reforzar el carácter de vía cívica con predominio de los peatones. A ese efecto se ha propuesto un pavimento a un único nivel, con dos rasantes que confluyan en una lima hoya central. Asimismo, se han definido zonas de estancia cuando el espacio se ensancha y una nueva plantación de arbolado a lo largo de la calle que permite recuperar en parte el carácter que tuvo antiguamente.

El pavimento es de pórfido natural de tres formatos que sirven para definir distintos ámbitos urbanos. En primer lugar, hay dos franjas centrales de adoquines, una de 2,8 m de ancho, para la circulación de vehículos, y la otra de 2 m para aparcamiento temporal. Cuando no hay vehículos, éstas se convierten en un espacio de paseo y extensión de las terrazas de los bares y restaurantes. En segundo lugar, se definen unas franjas de 1,20 m de ancho a uno o dos lados de la calle, que separan el ámbito de los coches del de los peatones. Están pavimentadas con piezas de 20x40 cm, y en ellas se ubican los alcorques con el arbolado, las luminarias y el mobiliario urbano. Por último, en las aceras, las piezas de pórfido tienen un formato más grande, de 40x60 cm. En el tramo más ancho de la calle se ensancha la acera de rasante más alta y se traslada el aparcamiento al lado suroeste, liberando el acceso al escalonado, que salva el desnivel: en este punto se incorporan unas jardineras fijas de acero Corten que junto con las farolas sirven de barrera para los vehículos.

A cada equipamiento de la calle, se le ha dado un énfasis con la intervención. Delante del teatro, el pavimento forma un círculo compuesto por adoquines concéntricos que pretende recordar el trazado de los teatros clásicos. En la iglesia se ha recuperado la escalinata frontal semicircular emulando la que había antiguamente, pero dándole mayor dimensión e incorporando una rampa para mejorar su accesibilidad. En la fachada lateral de la iglesia, que da a la plaza, se ha ampliado la plataforma al nivel de la sacristía para configurar un espacio que puede servir de escenario o podio y que permite conservar un buen ejemplar de olivo.

La intervención se extiende a las calles del Bogatell y de la Generalitat con pavimentos de piezas prefabricadas de hormigón de igual formato y disposición que las piezas de pórfido. A partir de ahora, estas calles tienen también una única rasante y se restringe el paso de vehículos, delimitado por las superficies de adoquines, por el mobiliario urbano, las luminarias y el nuevo arbolado incorporado.

Dónde
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